
viernes, 29 de mayo de 2009
Leopoldo Alas Clarin

Benito Pérez Galdos

miércoles, 6 de mayo de 2009
Rosalía de castro

Rosalía de Castro
En 1856 Rosalía marchó a Madrid, donde residió, salvo alguna pequeña estancia en Galicia, hasta 1861. Se desconocen los motivos por los que Rosalía se desplazó a Madrid, tal fue buscando éxito como escritora, o como actriz. Allí conoció a Manuel Murguía, con quien se casó en 1858. Parece que fue en Castilla donde Rosalía escribió sus primeros poemas en gallego (uno de ellos Adiós, ríos; adiós, fontes). Posiblemente residió algún tiempo por Levante.
Entre los años 1868 y 1870 volvió a residir en Castilla al ser nombrado Murguía bibliotecario en Simancas. En estos años Rosalía compuso la mayor parte de los poemas que en 1880 publicó en Follas novas. A partir de1870, año en que Murguía ocupó el cargo de Jefe del Archivo General de Galicia, Rosalía ya no volvería abandonar Galicia. Murió en Padrón en 1885.
En Rosalía encontramos una mujer fuerte, decidida, muy consciente de las dificultades que para una mujer del siglo XIX suponía el oficio de escritora, en una sociedad donde la labor intelectual estaba reservada únicamente a los hombres. Y no es sólo que asumiese el riesgo de esta situación, sino que se negó a realizar la “literatura femenina” que escribían algunas autoras de la literatura española como Carolina Coronado. El poema que encabeza, y no por casualidad, el libro Follas novas dice así:
Daquelas que cantan as pombas i as frores,todos din que teñen alma de muller.Pois eu que n’as canto, Virxe da Paloma, ¡ai! ¿de que a terei?
Adopta esta postura también con un planteamiento muy claro de defensa de los débiles, de las mujeres y hombres explotados, de “Galicia mesma, a quen xeralmente xuzgan o máis despreciable e feio de España, cando acaso sea o máis hermoso e dino de alabanza”.
Y en perfecta coherencia con esto, asume ese compromiso en su integridad, empleando la lengua marginada secularmente, la lengua que usaban aquellos que, muchas veces analfabetos, fueron los auténticos protagonistas y destinatarios de gran parte de sus versos.
Cantares gallegos
1863 es el año de publicación de Cantares gallegos, obra singular en la historia literaria gallega por varios motivos:
– Primer libro impreso escrito íntegramente en gallego– Supera en cantidad y calidad los intentos de los Precursores.– A pesar de ser el primero, el libro se convierte en una de las obras de mayor calidad de la literatura gallega.– Su autora es la única escritora gallega del siglo XIX.– Abandona la literatura romántica de los precursores elaborando una obra de tipo realista.
Las intenciones de la obra
“…facerlle máis palpable a España a injusticia que ela á súa vez conosco comete. Foi este o móvil principal que me impeliu a pubricar este libro…”
Así de clara se muestra Rosalía en el “Prólogo” de Cantares gallegos. Pero a lo largo del mismo expone de forma más concreta los motivos que la impulsaron a la publicación del libro:
– Cantar las bellezas de la tierra.– Dar a conocer costumbres y tradiciones gallegas.– Desvanecer los prejuicios que en España existen sobre Galicia.– Dignificar el idioma y demostrar que el gallego es una lengua apta para la creación literaria.
Gustavo Adolfo Bécquer

Gustavo Adolfo Bécquer
José de espronceda

Este poeta y revolucionario fue uno de los más grandes románticos españoles, el más popular del siglo XIX. Su vida integra la rebelión moral y la política, y su estilo se caracteriza por las imágenes arrebatadas y la permanente contradicción de dos estados anímicos: la exaltación y el desaliento.
Nació en Almendralejo (Badajoz), en 1808, pero se mudó pronto a Madrid y comenzó con notable aprovechamiento sus estudios, bajo la dirección del famoso don Alborotó Lista.
A los quince años, el día en que fue ahorcado el general Riego, fundó una sociedad secreta, Los Numantinos, para vengar su muerte. Las actividades de los jóvenes conspiradores fueron descubiertas y ellos, condenados a cinco años de cárcel, que se redujeron a unas semanas en un convento de Guadalajara, donde Espronceda compuso el poema Pelayo.
Con dieciocho años se exilió voluntariamente a Lisboa , donde conoció a Teresa Mancha, a quien siguió hasta Londres. Tras un viaje a Holanda en 1828, se instaló en París, donde participó en la revolución de 1830, y entró en España con una expedición de revolucionarios, que fracasó. Fue desterrado y durante ese periodo compuso varias poesías y la tragedia Blanca de Borbón. Raptó a Teresa, a quien había vuelto a encontrar casada y con hijos, y marchó con ella a España (1833). Ella le inspiraría uno de sus poemas más hermosos: Canto a Teresa. Vivió la triple embriaguez romántica del amor, la libertad y la patria.
Al regresar, indultado, a España en 1833, tomó parte en otros pronunciamientos que le supusieron nuevas persecuciones. En un banquete pronunció un discurso satírico en verso, que hizo hablar a toda la corte, y fue desterrado a Cuéllar, donde compuso El Estudiante de Salamanca. Posteriormente inició una brillante carrera literaria, diplomática y política. Adquirió fama nacional a partir de 1836, cuando publicó La canción del pirata que, a pesar de su discutida deuda con Lord Byron, constituye el manifiesto lírico del romanticismo español con su intensa defensa de la libertad, la rebeldía religiosa, social y política. Ese poema y otros ya conocidos se recogieron en Poesías de don José de Espronceda, de 1840, donde junto a poemas que reflexionan filosóficamente sobre el destino humano, aparecen otros políticos y amorosos. Tras la muerte de Teresa (1839), realizó nuevas interpretaciones del amor, como ocurre en el famosísimo poema A Jarifa en una orgía, donde expresa desilusión, hastío, lamentación del placer perdido y rebelión contra la realidad de la vida, con un lirismo contenido que añade ritmos poéticos inéditos que anticipan la versificación modernista.
En 1842, el mismo año de su muerte ocurrida en Madrid, fue elegido diputado a Cortes por el Partido Progresista, donde dio muestras de una excelente formación política.
El estudiante de Salamanca, incluido en las Poesías, funde poesía dramática y narrativa, y es precursor del Don Juan Tenorio de Zorrilla, que incorpora elementos de la novela gótica inglesa. Cárcel, amor, crimen, dolor y muerte también aparecen en el inconcluso El Diablo Mundo, de 1840, un extenso poema cuyo protagonista es testigo de excepción de todas las tragedias y los destinos humanos.
Espronceda también escribió la novela histórica Sancho Saldaña, aparecida en 1834, el relato fantástico La pata de palo, de 1835, la sátira El pastor Clasiquino, de 1835, y muchos artículos y obras dramáticas, que la crítica considera decepcionantes. Sin embargo, algunas de sus poesías, como las citadas y otras más, siguen valorándose por su sinceridad y ritmo y no se considera un demérito que estén inspiradas, tanto en temas como en ritmos, en los mejores poetas románticos europeos.
...del Canto I ...
Uniforme, monótono y cansadoes sin duda este mundo en que vivimos;en Oriente de rayos coronado,el sol que vemos hoy, ayer le vimos;de flores vuelve a engalanarse el prado,vuelve el Otoño pródigo en racimos,y tras los hielos del Invierno frío,coronado de espigas el Estío.¿Y no habré yo de repetirme a veces,decir también lo que otros ya dijeron,a mí, a quien quedan ya sólo las hecesdel rico manantial en que bebieron?¿Qué habré yo de decir que ya con crecesno hayan dicho tal vez los que murieron:Byron y Calderón, Shakespeare, Cervantesy tantos otros que vivieron antes?